El consultor político Benjamín Gebhard habló en El Acople sobre el panorama electoral y aclaró que a pesar de que las causas por las cuales alguien vota a determinado espacio o candidato, “son múltiples y no excluyentes entre sí”, la economía sí influye en el humor del elector. Dijo que Argentina sigue dividida como en 2015.
“Desde 2015 para acá la política argentina sigue dividida de la misma manera: la grieta se puede ver en los nombres de los frentes y se puede ver la búsqueda de unir, que es muy difícil de lograr”, analizó el especialista, a la vez que admitió que al existir distintas variables, es complicado determinar por qué vota cómo vota el electorado, aunque sí es claro cuánto influye la actualidad económica.
“Las campañas van a estar planteadas de ese modo: ya se está empezando a ver que la idea es que apunten a problemas económicos”, anticipó Gebhard y estimó que el frente oficialista, apostará más a la institucionalidad del país, a la gobernabilidad y la necesidad de seguir este camino para que el país pueda progresar”, aunque sin dudas, la otra mitad del electorado “estará en una discusión económica”.
“Definitivamente, el tema no está separado, y va a ser un gran problema para todos los que se presenten a explicar el posicionamiento”, dijo Gebhard y recordó que hace un tiempo las campañas no funcionan de la misma manera. “Una de las cosas que más rédito da es el posicionamiento previo, porque la mayoría de las campañas dejan de dar resultado y es una tendencia previa a la elección la que arroja el mismo resultado”.
Por eso, consideró que la ambigüedad va a jugar en contra de quienes cambien de espacios, porque genera un gran problema para la gente no saber dónde está el candidato, o verlo en un lugar y al tiempo en otro totalmente distinto, sin ninguna explicación. “Hay muchos movimientos, no tiene que ver solo con el partido, sino cual fue el perfil de su gestión”, agregó.
Y contó que en la consultora WE, empezaron a ver un problema de la representación de los candidatos. “intentar tomar por tonta a la gente, simplemente viendo hacia donde sopla mejor el viento, va a terminar siendo perjudicial para varios”, advirtió.
También habló sobre el posible condicionamiento de los candidatos nacionales a los provinciales. “Hoy los números son negativos a Cambiemos, pero no dejan de ser resultados locales y si bien la gente no está mirando lo que pasa a nivel nacional, mucha termina eligiendo lo que le da certidumbre y lo que le está funcionando”, dijo el consultor.
Y agregó que el Gobierno evita producir cambios fuertes porque los últimos generaron “mucho ruido” y si le va bien, “el electorado podría apostar a las continuidades”. Por ello, consideró que el Presidente tiene posibilidades de de reelección, gracias a los gobernadores.
Según las estadísticas, entre el 80 y 90 % de los presidentes que se presentan a reelección, la consiguen. “El escenario está totalmente abierto: el Gobierno tiene una gran posibilidad, cuenta con la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia, que son los electorados más grandes”, cerró Gebhard.
