No estaba desnutrida, pero murió igual

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Niños de la comunidad indígena wichi beben agua desde bidones plásticos en la provincia de Salta, Argentina. 28 de febrero, 2020. REUTERS/Ueslei Marcelino
Este martes una nena wichi de cinco años murió por meningitis. Fue trasladada de urgencia en un vuelo sanitario, tras presentar un cuadro febril, vómitos y convulsiones
Una mujer y niños de la comunidad indígena wichi en un asentamiento en la provincia de Salta. (REUTERS)
Una mujer y niños de la comunidad indígena wichi en un asentamiento en la provincia de Salta. (REUTERS)

En el marco de la emergencia socio-sanitaria que declaró el Gobierno en la zona, este martes murió una nena wichi de cinco años en Salta por un cuadro de meningitis.

El fallecimiento de la menor se produjo tras ser trasladada de urgencia en un vuelo sanitario luego de tener fiebre, vómitos y convulsiones. “Tenía todos los carnet de vacunación completos, era visitada por el agente sanitario regularmente, con el peso normal, no estaba desnutrida”, expresó el gerente del hospital Juan Domingo Perón de Tartagal, Juan Ramón López, en declaraciones a Télam.

La nena pertenecía a la comunidad wichi Pozo El Tigre, de la localidad Santa Victoria Este. Según precisó López, padecía de “un cuadro febril desde hace siete días” y ayer comenzó con vómitos y convulsiones. Ante esta situación, los padres la llevaron de urgencia al hospital local, donde los profesionales médicos debieron reanimarla. Por la gravedad de su estado, decidieron su urgente derivación en helicóptero a Tartagal.

“Llegó muy mal”, lamentó el gerente del hospital Perón, quien precisó que seguía teniendo convulsiones y que finalmente murió. A la menor se le practicó una punción lumbar para extraer líquido cefalorraquídeo, a partir del cual se determinó la patología. Según informó el titular del hospital, se trató de un “cuadro meníngeo”.

“Estamos esperando los resultados de los estudios bacteriológicos para establecer el origen del germen, pero de ninguna manera esta niña se puede sumar como una víctima más por desnutrición o bajo peso”, precisó con respecto a la decena de niños muertos -en su mayoría de la comunidad wichi- por causas de desnutrición y deshidratación.

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Semanas atrás, la Cruz Roja Argentina anunció que brindará más de 2 millones de litros de agua potable en dos meses a las comunidades de wichis y otros pueblos indígenas del norte de Salta a través de la instalación de un gran campamento humanitario del que participarán más de 400 personas durante 12 meses.

Por su parte, la Casa Rosada anunció la inversión de un millón de dólares para hacer siete pozos de agua en Santa Victoria Este, donde fallecieron al menos ocho niños wichis por desnutrición. A través de un préstamo del Banco Mundial, las obras proveerán este servicio básico para consumo humano y para la producción de alimentos a más de 4.500 habitantes de comunidades de pueblos originarios.

Se trata de un plan de acción con objetivos a corto, mediano y largo plazo para una zona donde, según un relevamiento realizado en el marco del plan Acción Humanitaria Salta 2020, el 75 por ciento de las poblaciones originarias de esta provincia no accede a fuentes de agua segura para su consumo.

El Consejo Nacional de Políticas Sociales lidera con todos los ministerios el desarrollo de pozos, redes de agua y atención sanitaria para las poblaciones del norte de Salta. Tras poner en marcha la Mesa Federal del Agua Social -programa que apunta a terminar con los problemas de salud y alimentación de más de 40 mil wichis-, está prevista la instalación de 14 pozos en los próximos meses.

Según explicó a Infobae la titular del Consejo de Políticas Social, Victoria Tolosa Paz, se acordó el asesoramiento y asistencia técnica; la planificación de los pozos de agua y alternativas de provisión; la electrificación y bombeo con bombas o paneles solares; la capacitación técnica y de operadores y la evaluación de plazos y necesidades presupuestarias o administrativas, al mismo tiempo que el soporte de energía y el financiamiento con aporte de privados y la articulación con la provincia, entre otras cosas. “No se puede avanzar en políticas sociales sin el acceso a agua segura. Por eso creemos necesario, desde nuestro rol articulador, sumar a las empresas y a todos los actores del Estado a que desarrollan actividad en Salta”, dijo la funcionaria.

Daniel Arroyo y el gobernador Gustavo Sáenz

Daniel Arroyo y el gobernador Gustavo Sáenz

Recientemente, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, visitó la zona para supervisar los trabajos de asistencia que están llevando adelante la autoridades nacionales en conjunto con las provinciales. Acompañado por el gobernador local, Gustavo Sáenz, el funcionario recorrió la localidad de Alto de la Sierra, a 70 kilómetros del municipio Santa Victoria Este, donde se reunió con los caciques del lugar.

“Todo eso está empezando a dar resultado, si bien la situación sigue siendo muy crítica”, destacó Arroyo tras la actividad. Además, indicó que “más allá de la emergencia, los caciques pidieron por cuestiones estructurales, como pozos de aguas y proyectos productivos”.

Fuente: Télam-Infobae