Schiaretti se mantiene en silencio. Mientras Juntos por el Cambio debate abiertamente sobre la posibilidad de incorporar al espacio que integran Juan Schiaretti, Juan Manuel Urtubey y Florencio Randazzo en el marco de una ampliación de la coalición opositora; tanto el exgobernador salteño como el diputado ratificaron que no formarán parte del acuerdo.
Solo el mandatario cordobés mantiene el silencio, y alimenta las especulaciones de una ruptura del frente inaugurado a principio de año. Quien habló de esa alternativa fue el mismo Urtubey, que aclaró que no forma parte de las negociaciones pero dejó abierta la incógnita sobre el futuro del espacio: «Va a haber unos que se van a ir a Juntos por el Cambio y otros que no iremos», sostuvo. Randazzo, por su parte, habló de llegar a «un acuerdo programático entre diferentes partidos» y fue apoyado por el jefe de campaña de Schiaretti, Diego Bossio, quien llamó a «construir una coalición amplia».
«Quiero dejar totalmente claro que yo no soy parte de ningún tipo de negociación», sostuvo Urtubey en declaraciones radiales. El salteño aseguró que mantiene su posición y que no tiene «la voluntad» de incorporarse a la alianza opositora. Pero también dejó abierta la puerta a una ruptura del frente común anunciado en enero de este año que llevaría a Schiaretti y al mismo Urtubey a competir en unas PASO por la presidencia. «Va a haber unos que se van a ir a Juntos por el Cambio y otros que no iremos. Claramente ese espacio dejará de existir como un espacio común, es un dato de la realidad», aseguró el salteño. En sus redes sociales, el exmandatario fue aún más gráfico: publicó el título de una nota periodística que lo incluía en el mismo grupo que Randazzo y Schiaretti, pero con su nombre tachado. «No todos somos iguales ni compartimos el mismo pensamiento», afirmó.
Randazzo, en tanto, fue más nebuloso en su explicación. Aunque aseguró que «No nos incorporamos a otra fuerza política. Somos peronistas y lo vamos a seguir siendo», el diputado afirmó que, junto a Schiaretti, creen en la necesidad de participar de una «gran PASO» con » todos y todas los que estemos convencidos de que la Argentina debe abandonar la grieta», lo que implica un «acuerdo programático entre diferentes partidos con un compromiso escrito para que nadie confunda el rumbo nunca más». Quien respaldó estas declaraciones fue el mismo Bossio, parte del equipo de campaña de Schiaretti: «Estamos convencidos que Argentina puede salir de la decadencia si logramos construir una coalición amplia, que una a todos los que no queremos más grieta, sino más diálogo».
Por su parte, la UCR de Córdoba rechazó la eventual incorporación de Schiaretti a JxC y aseguró que mantuvo «un modelo de gestión feudal que a lo largo de los años ha deteriorado las instituciones» en la provincia. En el comunicado, afirmaron que el radicalismo mantiene «desde hace 23 años» una posición «opositora al modelo de gobierno del peronismo. El planteo tensiona con la postura del presidente nacional del partido, Gerardo Morales, uno de los mayores interesados en sumar a Schiaretti.
Fuente: Página 12