El proyecto del Presupuesto 2025 también comenzará a tratarse en comisión el martes a las 14 en la Cámara Baja. El gobierno de Javier Milei amenaza con ir a la justicia o recortar fondos de Salud si persiste el rechazo al veto.
Comienza una semana clave para el Gobierno en el Congreso, que inicia el tratamiento en comisión del Presupuesto 2025 y medirá su capacidad de negociación en la sesión especial del miércoles, solicitada por los bloques dialoguistas y Unión por la Patria, para rechazar el decreto de Javier Milei a la ley de financiamiento universitario. El oficialismo intentará también retomar el debate por la privatización de Aerolíneas Argentinas y defender el decreto que limita el acceso a la información pública.
El proyecto del Presupuesto 2025 comenzará a tratarse en comisión el martes a las 14 en la Cámara de Diputados. Como dicen en el entorno de Luis “Toto” Caputo, la “ley de leyes” debe contemplar un déficit cero, objetivo “inquebrantable”. Tanto Unión por la Patria como la oposición dialoguista van a pedir que el ministro de Economía se presente en el Congreso para defender el proyecto, aunque desde el Gobierno ya adelantaron que no irá a dar explicaciones.
Por otra parte, para poder rechazar el veto de Javier Milei a la ley de financiamiento universitario, los bloques de la UCR, Encuentro Federal, la Coalición Cívica, la izquierda y Unión por la Patria deberán reunir el respaldo de los dos tercios de los diputados que estén presentes en la sesión. El último antecedente de este tipo ocurrió en Diputados, luego de que el presidente decidiera vetar el aumento jubilatorio dispuesto anteriormente por el Congreso. En el recinto, los bloques no lograron juntar los dos tercios. Fue por eso que el mandatario nacional agradeció a los «87 héroes» que apoyaron su rechazo.
Pero en esta ocasión el Gobierno enfrenta un panorama más complicado para conseguir los 86 votos para mantener el veto, ya que contaría con las voluntades de solo dos de los cinco legisladores radicales que cambiaron su voto con respecto a la actualización de haberes y, aparte, no habría homogeneidad en el PRO, su principal aliado. En LLA entienden que la clave estará en obtener al menos 34 (sobre 37) votos del PRO, la principal bancada aliada, que puso en dudas su acompañamiento.
Hay un dato que aportan desde las filas de La Libertad Avanza: aseguran que hay radicales, aquellos díscolos de la conducción nacional de su partido, como el tucumano Mariano Campero, que están en sintonía con la postura de LLA y que ayudarían a que el veto se sostenga. El PRO, sin embargo, no había garantizado todavía su apoyo al veto, por lo que Santiago Caputo, el asesor estrella del presidente, trató de seducir a Mauricio Macri en una reunión la semana pasada.
“Para qué voy a seguir yendo a comer milanesas si después no se cumple nada”, habría dicho Macri en conversaciones privadas tras los encuentros. También cree que “no se deja ayudar” y sospecha que las cenas en la Quinta de Olivos no representan una negociación genuina, sino un operativo de “contención”.
Sin embargo, este domingo el expresidente publicó un extenso texto en redes sociales en el que criticó la falta de transparencia de las universidades públicas en cuanto a rendición de fondos, en la misma línea de los planteos de La Libertad Avanza. «La defensa de la universidad pública, su acceso libre, gratuito y democrático, requiere poner fin al uso político de los recursos universitarios«, sostuvo Mauricio Macri, en un gesto que se interpretó como una señal de que parte del PRO votará con el oficialismo para respaldar el veto.
Mientras, los funcionarios intentan convencer a quienes se dejen. Las conversaciones están encabezadas por Santiago Caputo, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y sus dos vices, Lisandro Catalán y José Rolandi. También mantiene diálogo el ala karinista, con Lule Menem y el titular de Diputados, Martín Menem.
El diputado cercano al exjefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, Álvaro González, adelantó que votará en contra de la medida del presidente. «El Gobierno se aferra a un dogma, como es el déficit cero, en lugar de tratar de resolver la situación», señaló y confirmó: «Voy a votar en contra, efectivamente». Los votos de Héctor Baldassi, Emmanuel Bianchetti y Sabrina Ajmechet están en duda, ya que son los “amarillos” que abandonaron el recinto cuando se dio la media sanción a la ley de financiamiento universitario.
Los números para votar el veto a la ley de Financiamiento Universitario
A los diputados de LLA (Lilia Lemoine volverá de Ucrania exclusivamente por este tema) y del PRO, deberán sumarse los tres diputados del MID, encabezados por Oscar Zago. También deberá sumarse a la la tucumana Paula Omodeo, del monobloque Creo. Otro punto importante será ver cómo funciona el bloque de tres diputados tucumanos que responden al gobernador Osvaldo Jaldo. Serán clave los votos del bloque sanjuanino Producción y Trabajo, así como los diputados misioneros y rionegrinos.
Por otra parte, para rechazar el veto y así ratificar la ya aprobada ley de Financiamiento Universitario, están los 99 diputados de Unión por la Patria, 27 del radicalismo y la mayoría de Encuentro Federal, el bloque que preside Miguel Ángel Pichetto. Pamela Calletti, presidenta de Innovación Federal, dijo que votará a favor de las universidades, junto a sus dos coterráneos. También se sumaron los seis de la Coalición Cívica, los dos diputados de Santa Cruz, el monobloque del Movimiento Popular Neuquino y los cinco diputados de izquierda.
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Fuente: Perfil