Compartimos la columna de la periodista Natalia Nieto emitida los miércoles en el programa Compartiendo su Mañana por Aries FM.

Es que a la seguridad de afirmar que la fecha de elecciones del 4 de julio en la Provincia era inamovible, se sumó esta semana el reconocimiento del Gobernador, de analizar la posible postergación de la fecha en cuestión. Pandemia y crisis sanitaria o especulación electoral, esa es la cuestión.

Es que miremos el marco general: se encendió la señal de alarma en las provincias por el crecimiento de casos. Tres distritos ya fijaron comicios entre junio y julio y la aceleración de los contagios en la segunda ola de covid, con un panorama futuro incierto, pone presión en los calendarios electorales de los tres distritos que decidieron adelantar sus comicios respecto de Nación.

Así, mientras en Salta el gobernador Gustavo Sáenz ya evalúa una posible postergación de la fecha fijada para el 4 de julio, la oposición peronista al jujeño Gerardo Morales pidió rever el llamado a sufragar el 27 de junio y unificar votación con las elecciones nacionales. En tanto, en Misiones, que abrirá urnas el 6 de junio, hay silencio tanto en el oficialismo del mandatario Oscar Herrera Ahuad como en la oposición.

Este lunes, el gobernador Gustavo Sáenz habló brevemente al respecto, con colegas de Chicoana, donde dijo que para él “lo importante es la salud y la vida de los salteños” y admitió que “si esto no se modifica (en referencia a la situación sanitaria), las elecciones pasarán a un segundo plano”. Es la primera vez que hace pública la duda del Gobierno sobre si avanzar con el calendario electoral o mover las fechas.

Para esa definición, claro está, seguimos hablando de la situación sanitaria y no del resultado político que implicaría la unificación de la fecha con la elección nacional. Enseguida nos ocupamos de la especulación política local y ahora volvemos a otros distritos.

La luz amarilla ya se encendió, por ejemplo, en Entre Ríos, donde el Gobierno de Gustavo Bordet decidió suspender las elecciones internas que pensaba llevar adelante este domingo la UCR. En cambio, en Salta, la presidenta del Partido Renovador Cristina Fiore, confirmó que la interna será en las escuelas de los 60 municipios de los 23 departamentos.  Claramente, no será una movilización del millón de personas que implica una elección general, pero bien valdrá la pena ver qué pasa ese día, con esa pequeña muestra de afiliados renovadores (bueno, salvo Carlos Folloni, que quedó fuera de la contienda por no estar afiliado al partido que quería presidir…).

Entonces, hasta el momento, sólo Misiones, Jujuy y Salta se corrieron del almanaque que fijó la Casa Rosada con PASO para agosto y generales para octubre. Acá debemos elegir 12 senadores, 30 bancas de diputados de 11 departamentos distintos, concejales en los 60 municipios y en el intervenido municipio de Aguaray habrá comicios para ungir un nuevo intendente. También se elegirán los asambleístas para la reforma de la Constitución provincial que impulsa Sáenz.

En el caso misionero y salteño hay una lógica similar: como espacios locales (y transversales), buscan evitar que la polarización entre el panperonismo y Juntos por el Cambio impacte en sus legislaturas. Además, al ser espacios con terminales en el Frente de Todos, la unificación podría dificultar la constitución de los frentes provinciales. En los hechos, Sáenz tiene raíces PJ y en Buenos Aires le adjudican su origen al Frente Renovador de Sergio Massa, mientras que el misionero Herrera Ahuad amplió para estas elecciones el Frente Renovador de la Concordia e incorporó a una treintena de partidos.

Entonces, para ambos casos el desdoblamiento es una condición política necesaria. Misiones mantiene el 6 de junio sin visos de cambio para renovar 20 bancas en la Cámara de Diputados provincial. Incluso, para evitar aglomeraciones en las escuelas, se votará de 8 a 19.

En Salta, ya ni el Gobernador descarta la posibilidad de una postergación, pero dicen fuentes del Gobierno, que de fijar una nueva fecha de todos modos, sería siempre separada de la elección nacional. Esas fuentes saben que si hay que coincidir con lo que afirma el Gobernador, tiene que ser en base a la situación sanitaria por Covid y para eso, siguen la línea del presidente del COE local, Francisco Aguilar, quien admitió la posibilidad de cambiar la fecha electoral cuando estuvo el lunes pasado en El Acople. Directamente, advirtió que si la situación epidemiológica es mala, se deberá correr la fecha.

En Jujuy, hace dos días seis partidos políticos del Frente de Todos exigieron al Gobierno del radical Morales -a través de un amparo judicial- que deje sin efecto el adelantamiento de las elecciones provinciales previstas para el próximo 27 de junio.

Esa estrategia de la separación de fechas le dio buenos resultados a Morales en 2019, cuando pese a la presión del expresidente Mauricio Macri decidió desdoblar los comicios que le dieron la reelección y se desligó de la suerte nacional de Juntos por el Cambio. En Jujuy definen la renovación de 24 bancas de diputados provinciales (la mitad de la Legislatura) y la actualización parcial de concejos deliberantes y comisiones municipales.

Sumamos que en el Gobierno de Alberto Fernández, hay expectativas por las decisiones que se tomen en Corrientes y Santiago del Estero, los únicos distritos que deben elegir gobernador, desfasadas ambas por sendas intervenciones federales. Tanto Gustavo Valdés como Gerardo Zamora tienen posibilidad de ser reelectos.

Y a esta hora, y con diferentes opiniones dentro del espacio, Juntos por el Cambio está buscando alcanzar una única postura sobre la propuesta del oficialismo nacional para postergar un mes las PASO y las elecciones legislativas, en medio de la pandemia y la segunda ola de casos de Covid.

Tal parece que al Gobierno de Salta no le quedará otra que subirse a la ola (pero no la de Covid), y postergar la fecha que de mantenerse, llevaría a más de un millón de electores a las escuelas y en pleno invierno.