El presidente de la Cámara de Turismo de Salta, Carlos Eckhardt, habló en El Acople sobre las dificultades del sector. Advirtió que no podrán pagar sueldos de abril ; que los diferimientos impositivos “no les sirven” y que la declaración de emergencia “sería el paraguas para que paren los relojes”. Destacan encuentros con el ministro de Turismo y su equipo, pero insisten en reunirse con el gobernador, Gustavo Sáenz.

El dirigente de la Cámara de Turismo, Carlos Eckhardt describió el panorama del sector y advirtió que están “mirando seis o siete meses hacia delante como mínimo para tener perspectivas”, porque se debe trabajar sobre la realidad “que nos toca, sobre todo con la previsibilidad; trazar una colectora, hacer nuestra propia previsibilidad y caminar a la velocidad que podamos”. Lo describió como un proceso de mediano plazo, como mínimo,  porque aunque tengamos la oferta dispuesta en fecha, “no tenemos la demanda”.

Y entonces, explicó que “los nuevos protocolos generarán como mínimo un 50% de reducción de la oferta en todas las formas y al disminuir a la mitad la oferta y con los costos en alza, todo indica que deberíamos aumentar tarifas”, aunque “hoy el mercado no lo admite, porque está en la misma situación de dificultad. Es toda una situación de evaluación permanente y sumamente compleja”, enfatizó Eckhardt.

Sobre las posibilidades de ahorro de hoteleros de zonas de mayor ocupación, dijo que en Salta hay estacionalidades bajas, medias y altas, por lo cual, “como elemento en contrario, tenemos ingresos dispares y egresos en alza”. Citó como ejemplo que aunque los valles en verano, hayan tenido buen nivel de ocupación en diciembre, enero y febrero, “todo se pierde; no tenemos stock porque en la cama que no fue ocupada, mañana no podemos poner ahí dos personas. Eso se pierde”, explicó el dirigente turístico.

Imposibilidad de pagar sueldos y de acceso a créditos

Sobre los sueldos,  Eckhardt afirmó que “definitivamente no tenemos posibilidad de pagar los sueldos y ya no se trata de un problema económico, es un problema de subsistencia”, y contó que se hizo un gran esfuerzo para pagar sueldos de marzo; pero abril encuentra al sector en una situación “dificilísima”.

Según el presidente de la Cámara de Turismo, desde 2012 trabajan con pérdida de rentabilidad y “el segundo semestre de 2016 no le llegó a nadie; al turismo tampoco”. Agregó que han pagado “tasas usurarias hasta fin del año pasado”.

Y que el CFI le pertenece a todas las provincias, pero “los créditos afectados al turismo, están afectados también a la industria y al agro; es un crédito que se bancariza por Banco Macro, pero debe hacerse una valoración cierta sobre quiénes pueden acceder”. Por ejemplo: aquellos con créditos activos, que no hayan llegado al 75% del pago de la deuda anterior, no pueden acceder. Quienes no están bancarizados, tampoco. “Los créditos del CFI que son blandos y tienen un periodo de gracia, son insuficientes para atender la realidad del sector”, afirmó.

E inmediatamente, insistió con el crédito a tasa cero, que todavía no se puso en práctica. “Si podemos generar un endeudamiento de hasta 400 mil pesos desde el sector, para dos nominas salariales, es de entender que dentro de dos meses seguiremos hablando de lo mismo”, sentenció.

Y dijo que “tomar nuevos endeudamientos sin la previsión del aporte para poder hacer un cambio de paradigma de la actividad, sólo generará un pasivo”.

Pedido al Gobernador y la Intendenta

Eckhardt también apuntó contra el Gobierno Provincial y Municipal, porque las herramientas solicitadas “hasta el día de hoy no se trataron y son las que podrían generar previsibilidad”.

El pedido de los hoteleros apunta a la declaración de emergencia económica, productiva y fiscal, “para que en ese paraguas se paren los relojes”, porque los diferimientos “no sirven para nada”, porque seguimos contrayendo deudas para pagar después de 90 días. “¿Quién te dice que el día 91 vamos a estar funcionando con recursos para asumir las nuevas obligaciones?”, cuestionó el dirigente.

El pedido incluye exención en los ingresos brutos y en la ley de sellos. Y recordó que a partir del 2 de enero del año próximo, bajará el 50% de la alícuota que corresponde a esos impuestos “para empezar a transitar de nuevo el camino público-privado que tan buen resultado le ha dado el destino de turismo Salta”. Y volvió a insistir en el rol del sector, que durante “24 años ha aportado ininterrumpidamente para que Salta sea reconocida en el país y el mundo; pero el socio caído en desgracia necesita crédito, no solo dinero, sino crédito de creer, que vamos a poder volver a salir y reemprender y encontrar de nuevo una línea de trabajo en conjunto”, sostuvo el dirigente.

Según Eckhardt, “el gobernador no ha tenido la posibilidad de escuchar la problemática del sector, o nosotros no hemos tenido la capacidad de transmitir debidamente el problema que tenemos”. Y destacó que no necesitan “un trabajo político, sino de gestión para llegar a los resultados y esas son decisiones de la Provincia, que tiene potestad para tomarlas sobre los segmentos que hemos demandado”, dijo.

Finalmente, afirmó que la problemática “es sumamente grave: porque cuando hablo de territorialidad, hablo de La Puna a La Yunga; de 50 mil personas que viven del turismo, aproximadamente y eso significa el 10% del Producto Bruto Geográfico de la provincia”. La describió como “una actividad inclusiva, económica y humana, porque no tenemos una industria parada en la que nos falta el operario: tenemos recurso humano, que hasta diciembre era nuestra mayor fortaleza y hoy es nuestra mayor debilidad. La gente en el día a día realmente cada vez está peor”, sentenció en El Acople.