Con el año electoral terminado, los gobernadores peronistas de todo el país buscan reorganizarse luego de la derrota del Frente de Todos. En Salta, el gobernador de la Provincia, Gustavo Sáenz, se enfoca en fortalecer su espacio y trabaja específicamente en el plano provincial. A su vez, Juan Manuel Urtubey, el exgobernador, dialoga con Juan Scharetti y trabaja en construir la “liga antigrieta”. El camino hacia 2023 comienza a delinearse.

Según consignó Infobae, los resultados de las elecciones legislativas obligaron a los gobernadores peronistas a revisar su gestión, su relación con el Gobierno nacional -derrotado ante Juntos por el Cambio- y su construcción de cara a 2023. Si bien Juan Schearetti mostró en reiteradas oportunidades su intención de crear una especie de liga de mandatarios provinciales que esté por fuera de la grieta, hoy sus posibles aliados están enfocados en “fortalecer” sus frente internos.

Si bien Hacemos por Córdoba quedó segundo en las legislativas con el 25%, Schiaretti busca capitalizar la banca que le arrebató al oficialismo en el Senado, lugar que ocupará su esposa Alejandra Vigo tras ganarle a Carlos Caserio. Desde allí, según confesaron a Infobae en su entorno, buscará insistir con las críticas por las “inequidades” en los subsidios a las provincias y con sus cuestionamientos al Gobierno.

Probablemente busque, además, armar su proyecto “anti-grieta” y un correlato político electoral para el 2023. Hasta el momento, Schiaretti no cuenta con el apoyo del resto de los gobernadores peronistas. Se debe a que la mayoría piensa en su reelección o la instalación de un candidato propio, el armado de frentes locales y, por otro lado, prefieren no confrontar con la gestión de Alberto Fernández por los dos años que quedan.

En Santa Fe, por ejemplo, consideran que Omar Perotti reafirmó su liderazgo al ganar las PASO ante Agustín Rossi. “Ese objetivo se logró y empezamos a trabajar para construir y fortalecer el poder político”, analizan sus asesores. Al no contar con la posibilidad de reelección, hasta el 2023 pondrán sus esfuerzos en instalar un candidato propio, por lo que descartan la posibilidad de sumarse a “un frente político” nacional.

En Catamarca invierten la oferta: creen que Schiaretti es el que debe unirse al grupo de los gobernadores del Norte Grande. “Uno tiene que equilibrar y lo lógico es que las provincias con mayor densidad demográfica se alineen con provincias con menor densidad, como es el caso de Córdoba. Más que una liga política, tiene que ser una liga económica”, analizaron cerca de Raúl Jalil.

“Nosotros ganamos por 14 puntos. Es un muy buen resultado después de todo lo que pasamos con la pandemia pero la gente reconoció el trabajo que hicimos”, agregaron. Para afrontar los próximos dos años, el mandataerio catamarqueño busca “contener” el gasto público y bajará de rango tres Ministerios.

Ricardo Quintela, de La Rioja, también coincide con la necesidad de acercarse a Schiaretti, pero siempre en términos de acuerdos y necesidades de gestión, lejos de cualquier estrategia electoral. “Tenemos una muy buena relación, poco contacto político pero sí institucional”, describieron la relación con el cordobés, con quien podrían reunirse en los próximos días.

“Para los próximos dos años necesitamos poder plantear una estabilidad económica, con muchas obras y escuchar a la población, que es una de las cuestiones que planteamos que no se había dado a nivel nacional. Tiene que haber mucha participación de los gobernadores -fundamentalmente del Norte Grande- que venimos trabajando desde el principio de la gestión. Se ha consolidado y hay mucho capital político en este grupo”, respondieron a este medio respecto a los ajustes que debe aplicar la gestión de Alberto Fernández.

En Salta sucede una situación particular: mientras Juan Manuel Urtubey mantiene reuniones con Schiaretti para construir la “liga anti-grieta”, su sucesor Gustavo Sáenz “prioriza lo provincial” y se concentra en su reelección. Pese a su amistad con Sergio Massa, en el entorno del gobernador aclararon que “no tiene referencia nacional” y que no se siente “parte integrante” del Frente de Todos.

“De hecho, está armando un frente provincial con parte de los integrantes de las fuerzas nacionales. Su objetivo está en ser reelegido. Incluso planeamos adelantar el cronograma electoral, como lo hacía Urtubey. Sáenz se corre de lo nacional y prioriza lo provincial. No está dentro de ninguna liga de gobernadores”, acotaron.

Al igual que Axel Kicillof en territorio bonaerense, Omar Gutiérrez en Neuquén, Oscar Herrera Ahuad en Misiones y Arabela Carreras en Río Negro, impulsaron cambios en sus Gabinetes en los últimos días, con la perspectiva de relanzar la gestión para el último tramo de este año e iniciar el 2022 con nuevas caras. En Chaco, la única provincia que pudo revertir los resultados de las PASO a las generales, Jorge Capitanich apuesta a la inyección económica con anuncios de obras.