El gobierno argentino selló un acuerdo con Brasil y Bolivia para triangular gas y asegurarse el abastecimiento durante el invierno en el Noroeste Argentino (NOA) durante este invierno. Por un acuerdo entre Enarsa y Petrobras, Argentina tomará parte del gas que Brasil tiene contratado con Bolivia. A mediados de 2025 ya estará en funciones la reversión del Gasoducto Norte.
El Memorándum de Entendimiento -MOU- se firmó entre las empresas públicas Energía Argentina ( Enarsa) y Petrobras.
Así, el país solucionará el suministro de gas en Córdoba, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Tucumán, Salta y Jujuy, las provincias que actualmente consumen las importaciones del combustible de Bolivia, hoy declinantes.
El rol de Vaca Muerta será clave no solo por convicción, sino también por obligación. El abastecimiento de gas en el norte del país atraviesa una situación crítica, por el declino de la cuenca de esa región y también por el desinfle de Bolivia, cuyo contrato con Argentina caducaba a fin de junio de 2024.
El norte del país se verá favorecido desde mediados de 2025 con la reversión del Gasoducto Norte, una obra pública que se demoró en la transición política, pero que fue la única que Javier Milei habilitó.
La reversión del Gasoducto Norte llegará para solucionar ese problema para no solo llevar la molécula de gas no convencional de Vaca Muerta a esa zona, sino también a menor costo, lo que solucionaría parcialmente solucionado el abastecimiento en el norte, y el país se evitaría una sangría en mayores importaciones de Gas Natural Licuado (GNL).
De esta forma, la Argentina tomará parte del gas que Brasil tiene contratado con Bolivia, mientras el país gobernado por Lula Da Silva usará más energía hidroeléctrica -más barata- y gas licuado.
Milei habilitó la obra tras un pedido de Paolo Rocca, el dueño de Techint, que participa de la construcción, la fabricación de tubos, la producción en Vaca Muerta, el transporte y la distribución del gas.
A su vez, el acuerdo entre Enarsa y Petrobras «posibilitará el intercambio de información, identificación y estudio de viabilidad de las diferentes alternativas, acciones y mecanismos de mediano y largo plazo para la cooperación y complementariedad energética entre Petrobras y Enarsa«, informó la empresa estatal argentina, que tiene a cargo tanto las importaciones de gas de Bolivia como las de Gas Natural Licuado (GNL).
Esta semana Enarsa adjudicó una nueva licitación de importaciones de gas licuado.
Fueron 10 cargamentos, que serán provistos por BP (9) y Glencore (1), a un precio promedio de 9,97 dólares por millón de BTU y con un gasto apenas superior a los USD 205 millones. Hace unas semanas, el anterior «tender» había arrojado un precio promedio de USD 9,99 y un gasto de USD 209 millones.
Fuente: BAE Negocios