Lo dictó la justicia federal de Morón. El juez calculó la pérdida salarial de las víctimas de trata con fines de explotación laboral. En diciembre pasado, hubo dos detenciones por trata de personas en Salta y en el marco de la misma investigación.

Hay resoluciones judiciales que abren caminos. Y este parece ser el caso del fallo de 2016 páginas que se firmó en el Juzgado Federal N° 3 de Morón el pasado 11 de febrero, en el marco del expediente 70252 /2019.

En la causa, abierta contra los responsables del Templo Filadelfia, se acusa a la cúpula de la secta de explotar laboralmente a sus fieles.

Las víctimas trabajaban en tres panificadoras de la secta todos los días, un mínimo de 12 horas, sin salario alguno y bajo la amenaza constante de ser castigados si no vendían toda la mercadería o si comían algo de lo que llevaban en sus canastos de venta ambulante.

«En caso de haber un faltante en el dinero o de haber ingerido alguno de los productos se les formulaban reproches en los que se les hacia saber, delante de todos, que habían faltado a Dios, marcándolos como ladrones, impartiendo también castigos físicos. Por este motivo el horario laboral solía extenderse hasta que el vendedor lograba comercializar toda la mercadería», remarca el fallo.

La explotación laboral es la imputación principal del expediente en el que ya se identificaron unas 100 víctimas aunque cada semana se suman más y más. El caso también incluye denuncias de abusos sexuales en rituales religiosos, apropiación de menores y hasta un episodio de posible instigación al suicidio de un joven al que atormentaron luego de que comentara que era gay.  

Julieta (27), víctima del Templo Filadelfia.

Julieta (27), víctima del Templo Filadelfia.

En la resolución del 11 de febrero, además de procesar por una espeluznante gama de delitos a 15 líderes de la secta, el juez subrogante Elpidio Portocarrero Tezanos Pinto fijó un embargo de 750 millones de pesos: 50 millones por cabeza.

Lo inédito no es tanto por el monto del embargo (que es muy importante) sino cómo se realizo el cálculo destinado a resarcir a las víctimas.

Por primera vez en una causa de trata con fines de explotación laboral se tuvo en cuenta lo que los fieles esclavizados perdieron de ganar de salario en todo el tiempo en el que estuvieron trabajando gratis y en pésimas condiciones para el Templo Filadelfia. Algo así como la figura del lucro cesante en las leyes laborales.

«Se entendió para el cálculo preliminar de las sumas de dinero que habría para indemnizar a las víctimas del caso (…) el salario que les hubiera correspondido obtener si en lugar de ser explotadas hubieran trabajado libremente y conforme a las leyes laborales», dice la resolución.

En el fallo se hace mención a un primer embargo de 23 millones por cabeza dictado por la justicia de instrucción de Morón, que fue la primera que comenzó con la investigación para luego pasarla al fuero federal. Y consideró insuficiente esa cifra inicial porque «el cálculo practicado no tuvo en cuenta la extensión de la jornada laboral (que llegaba a las 12 horas) ni se computaron las horas extras, ni descanso o vacaciones no gozadas».

La secta del terror

El juez Tezanos Pinto heredó una investigación realizada por su colega Néstor Barral (que ascendió al cargo de camarista en 2020), su secretaria Mariana Sioli y una delantera de fiscales muy experimentados: Santiago Marquevich y los responsables de la Protex: Marcelo Colombo y María Alejandra Mangano.

La historia del Templo Filadelfia -nacido en San Justo- se remonta a los años 70 cuando fue fundado por las hermanas Divina Luz y Eva Petrona Pereyra. Para sus fieles -casi siempre familias vulnerables- ellas eran las mensajeras de Dios y por lo tanto todo lo que les dijeran y ordenaban estaba fuera de discusión.

Cuando Divina Luz murió en 1998 la sucedió su hija, Adriana del Valle Carranza, que llegó a estar acusada en esta causa pero también murió, en 2019.

Allanamiento en el templo Filadelfia, en La Matanza. Investigan violaciones, apropiación de menores, reducción a la servidumbre y vejaciones.

Allanamiento en el templo Filadelfia, en La Matanza. Investigan violaciones, apropiación de menores, reducción a la servidumbre y vejaciones.

La denuncia contra el templo, realizada por Julieta Coria, una joven cuya madre entró al culto en la crisis del 2000 con sus seis hijos, empezó en 2018 en la Justicia provincial impulsada por la abogada querellante Mariana Barbitta.

«Todo duele: el que te hayan sacado las oportunidades, el que te hayan sacado tu libertad. Sin que me diera cuenta me sacaron una parte de mi vida, años que ya no vuelven… no haber estudiado, no haber tenido amigos», contó Julieta (27) a Clarín en una entrevista realizada el pasado diciembre. Ella tenia 8 años cuando entro en Filadelfia.

La causa empezó en la Justicia ordinaria pero pasó rápidamente a la federal cuando los testimonios comenzaron a hablar de tráfico de personas entre los diversos centros del templo en Salta, Tucumán, Mendoza, Neuquén, Bahía Blanca y hasta en Paraguay.

Eva Petrona (76) fue detenida y actualmente se encuentra en arresto domiciliario en la casa de una de sus seguidoras y acompañada por una de sus fieles. Azucena una mujer de 52 años que duerme a los pies de su cama por si necesita algo. Azucena no conoce otra vida que la del Templo desde que, muy chica, Eva la trajo desde Tucumán luego de convencer a su madre.

Los bienes que fue comprando con el fruto del trabajo esclavo de sus seguidores incluyen departamentos, autos y campos. Todos están congelados por orden de la Justicia. Por lo pronto una flota de 10 autos ya fue puesta a disposición del Estado para su venta.

El dinero será depositado en un plazo fijo renovable cada 30 días a la espera de la sentencia firme del caso. Este es solo el principio: la lista de propiedades y cuentas sobre la que trabaja la Dirección General de Recuperación de Activos y Decomisos de Bienes de la Procuración es larga.

Además en el juzgado federal de Morón la investigación entró en una nueva etapa: la del lavado de dinero, que promete nuevas sorpresas sobre el patrimonio de los líderes del Templo Filadelfia.

En Salta

En diciembre pasado, en Salta se realizaron dos operativos en forma simultánea, el primero de ellos en la calle Zuviría 1320, y el segundo, en la calle Luis Borja Díaz 1300. Usaban a la iglesia evangelista Filadelfia como pantalla.

El primero de ellos estuvo a cargo de la Policía Federal Argentina donde quedaron detenidas dos personas. El segundo operativo fue puesto en acción por oficiales de la Gendarmería Nacional. Se realizaron a pedido de los juzgados federales de Morón, provincia de Buenos Aires, Nº1 y 3º a cargo de Santiago Marquevich y Néstor Pablo Barral, respectivamente.

Al ingresar al lugar, los oficiales de la Federal con varias personas en condiciones infrahumanas que eran explotadas laboralmente. Entre ellas, había menores de edad.

Fuente: Clarín