Acciones de inteligencia prohibidas en carácter de autor y abuso de autoridad, son las figuras por las que el expresidente Mauricio Macri resultó procesado y embargado. Por espiar durante un año a viudas, a madres, hermanas y familiares de los tripulantes del submarino Ara San Juan.

“Fue Mauricio Macri quien no solo permitió la realización de esas tareas ilegales, sino utilizó esa información para tomar decisiones”, es la conclusión a la que llegó el juez de Dolores Martín Bava al procesar al expresidente por espionaje a los familiares de las víctimas del submarino, tras analizar numerosa documentación.

Para el juez en algunos casos esas decisiones tuvieron que ver con tener información adelantada sobre los reclamos que recibiría o las manifestaciones organizadas por las víctimas ante la visita del entonces Presidente a la ciudad de Mar del Plata.

El fallo tiene una mirada especial respecto de las víctimas. “No caben dudas que las víctimas en la presente en la mayoría resultan ser mujeres. Ellas son parejas, madres o hermanas de los 44 tripulantes del submarino desaparecido, como también familiares de trabajadores de la pesca de Mar del Plata”.

“Estas mujeres se encontraban en una clara situación de vulnerabilidad y el Estado lejos de brindarles contención o apoyo y actuar con la debida diligencia que le imponen distintos instrumentos internacionales, las espió ilegítimamente de manera sistemática y constante”, sentenció el juez en una resolución de 171 páginas.

La mayoría de las mujeres son representadas por la abogada Valeria Carreras que impulsó fuertemente el caso y hoy dijo que al menos hay tres discos rígidos con información sobre los movimientos de los familiares.

La causa tiene una docena de procesados, entre ellos la cúpula de la AFI del gobierno de Macri, encabezada por Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.

FUENTE: ÁMBITO